Para José Alberto Carrera ser sommelier es una pasión, un aprendizaje constante y una relación cercana y armoniosa con el cliente. Con una amplia experiencia en el rubro que se inició fundamentalmente en La Mar, de Gastón Acurio, llega a Astrid & Gastón, donde hoy es sommelier. “Mi trabajo consiste en elaborar cartas de vinos de acuerdo al concepto de cada chef, saber interpretarlo”, dice. Su lema es: una buena sugerencia no es el vino más caro, sino la sensibilidad del producto ante el plato de comida.